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Carrazeda de Ansiães es un municipio de grandes contrastes, pues gran parte de él se encuentra en la región del Alto Duero, caracterizada por los valles de los ríos Duero y Tua, con cuestas empinadas, cubiertas de viñedos, sotos de olivos, almendros e higueras, y bosques de pinos y alcornoques, mientras que el resto está rodeado por altas montañas, valles estrechos y pequeñas mesetas, en las que predominan el granito y el esquisto, y las inclemencias del clima arrecian en invierno.
El sector estuvo habitado desde tiempos muy remotos y en él se han hallado varios dólmenes, como los de Zedes y Vilarinho de Castanheira.
El pueblo de Carrazeda de Ansiães también tiene una larga historia, pero conserva pocas reliquias de su importante pasado; cerca del castillo en ruinas, la
Igreja de São João, una bonita iglesia románica, así como la Iglesia de San Salvador, en el mismo estilo, merecen visitarse.
No lejos de allí, en Lavandeira, la Iglesia de Santa Eufemia combina los estilos barroco y renacentista con un curioso porche de pilares toscanos que sostienen el tejado.
Otros sitios de interés son el
Solar dos Mesquitas, en Selores, la Iglesia de Seixo de Ansião, con un bello altar del siglo XVII que muestra un maderamen tallado y dorado, y la aldea prehistórica de Castanheira.
Las artesanías típicas de Carrazeda de Ansiães incluyen trabajos de madera, como las raras esculturas religiosas de Pinhal do Norte, toneles y barriles, y cestería.
En cuanto a la gastronomía local, la opción es variada y va de platos de caza, con perdiz y jabalí, a excelentes carnes, embutidos y jamón, asado de cabrito y bacalao, y deliciosos dulces y pasteles de almendra.
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